Deferencia docente

Despues de una breve vacación retomo las actividades del blog.
 Estos días estuve pensando sobre el rol de autoridad que ejercen los y las docentes en la universidad ¿Cuál universidad? Puede ser cualquiera del entorno boliviano.

Fuente: lacapital

Cuando estuve en la universidad no me gustaba participar en clases por diferentes razones, una de ellas era el miedo  a que se burle de mis opiniones el docente o mis compañeros o compañeras, así que pasaba desapercibida entre las muchas caras que llenaban  el aula. Hubo una vez en que un docente nos dijo que el sabía más cosas porque el leía bastante y nosotros "no sabíamos nada porque no leíamos los muchos libros que el leyó", a veces cuestionaba si los o las docentes tenían más conocimiento que yo, al principio creía que era cierto porque hicieron varios cursos, maestrías e inclusos doctorados, sin embargo, en estos últimos años reconstruí la idea de que el docente "tenía toda la razón" porque cada persona tiene conocimientos que otros u otras desconocen, además, entendí que un o una docente podría equivocarse por el simple hecho que es un ser humano, como yo y que necesita aprender más, como yo.

Analizando la educación universitaria, comprendí de que aún existe esa educación vertical, donde el docente es la panacea de conocimientos y el o la estudiante es la tabula rasa, lista para ser escrita porque esta vacía. Existen pocos o pocas docentes que son verdaderamente deferentes con sus estudiantes, sin recurrir a burlas o a diferentes subestimaciones, no obstante siguen habiendo esos docentes que te aterran hasta el punto provocar un ataque de nervios al momento de preguntarte algo. Aún sigo cuestionándome si esa actitud es para crear un prestigio o una forma de hacer aprender su materia.

Pero no todo es culpa del o la docente también es el sistema educativo universitario que forma a personas, timoratas y con bajo sentido crítico, nulas en la creatividad...

Fuente: monografias.com

Entonces, empecemos a cuestionar el rol de docente en cuanto al conocimiento y autoridad, ¿Realmente ellos o ellas nos ayudan a ser libres? No quiero que se malinterprete esta entrada, ni que tampoco me tipifiquen como una persona frustrada que tiene resentimientos con la escuela y la universidad, solo quiero que los lectores y lectoras de este blog comiencen a cuestionar su vida académica; también, quisiera que si algún docente o alguna docente universitaria lea esto, se pregunte si realmente son deferentes con sus estudiantes, si respetan sus conocimientos y si pueden reconocer alguna equivocación que hicieron en el aula.

La educación libera y más que todo en la universidad donde esta se convierta en  un milagro que haga a los ciegos ver, a los mudos hablar para llegar a un intercambio de conocimientos, teniendo la certeza de que aprender es un trabajo continuo que no termina hasta la muerte del ser humano.